Y decidí sentarme a esperar. A ver que pasa. Repitiéndome las palabras CALMA y CONFIANZA. Y de pronto… ¡boom! La vida me está trayendo regalos maravillosos y estoy mil de agradecida.

Puse foco en la paciencia, entrené la calma y me quise, me agarré fuerte de la mano y esperé sentada. Mirando hacia delante.

Y sabes cuando vienen todas esas cosas maravillosas y el miedo que da? cuando todo es como no te esperabas ni podías imaginar, es mejor. Cuando de pronto muchas cosas se dan la vuelta y te llegan de frente y vienen a abrazarte. Y también viene ese miedo ilógico, a todo, ese miedo irracional a que todo vaya bien. Ese miedo a que esté saliendo bien y fácil, ese miedo a que de verdad eso en lo que llevas trabajando y trabajándote esté dando sus frutos. Y lo disfrutas igual.

Y es que es un poco absurdo. Ese vértigo de cuando todo está bien.
Y es un miedo maravilloso e incrédulo, porque que las cosas salgan mal ya te lo sabes y esto, es nuevo, es bueno.
Y es que todo da miedo un poquito, no? Y si no yo seguro que me aburriría. El miedo bueno.
Y voy a sentarme de nuevo, a contarme todas estas cosas bonitas, a ver si me las creo. Jeje

Gracias mil