Desgarro es un libro escrito y dibujado desde la entraña sin saber que finalmente sería un libro.
Desgarro es todo aquello que te angustia y no sientes propio, todo lo que se convierte en dolor mental, físico y también del alma.
Desgarro es el camino hacia tener ganas de vivir. Suena duro, pero así es. Lo que nadie explica, lo que no se ve, todo aquello que se silencia y no se es capaz de comprender cuando se trata de problemas de salud mental. No es nada físico, todo está en el interior.
Un libro para todas aquellas personas que están (o han estado) muy en el fondo o tienen cerca a una persona que lo está.
No es un libro que cure, no es un libro que sane, es un libro que relata el camino desde el sentir, contado desde la entraña. Quizá, ojalá, te acompañe y te abrace en tu proceso, o te ayude a saber reconocer todo ese tormento.
Quise morirme, lo pensé muchas veces,
lo intenté tres y sólo una se lo conté a mi psicóloga.
Crear desgarro ha sido más fácil que vivirlo. Y digo crear porque Desgarro nació después de vivirse. Desgarro fue un tiempo de caída a lo más profundo, a la oscuridad absoluta donde ni sabes, ni puedes y a veces ni quieres seguir viviendo.
Desgarro es ese camino que recorrí durante meses, desde no saber qué era lo que me estaba pasando, ser consciente, querer dejar de vivir, no saber pedir ayuda y dejarse por completo. Un camino en el que el rescate fue un imprescindible: una red de apoyo y acompañamiento profesional.
Desgarro es desgarro porque decidí que morirme no era la opción.
Las personas que ya han leído desgarro dicen…
El viaje que propone es el más valiente de todos, el de mirar al dolor y a la muerte a la cara y enfrentarlos hasta ascender de nuevo a la superficie. Por el camino hay tristeza, angustia y miedo, pero también la luz de quien ha visto el abismo y ha sido capaz de rescatarse.